Cómo citar: Ortiz-Beltrán O Pinzón-Espitia O, Aya-Ramos L. Asociación entre el riesgo nutricional y la estancia hospitalaria en paciente
pediátrico.Ciencia e Innovación en Salud. 2020. e78: 92-103. DOI 10.17081/innosa.78
Asociación entre el riesgo nutricional y la estancia hospitalaria en paciente
pediátrico
Association between nutritional risk and pediatric hospital stay
Omar Danilo Ortiz-Beltrán
1
*, Olga Lucia Pinzón-Espitia
1,2
, Laura Brigitte Aya-Ramos
3
1
Universidad Nacional de Colombia. Facultad de Medicina, Bogotá, Colombia
2
Hospital Universitario Mayor Méderi. Universidad del Rosario. Bogotá, Colombia
3
Instituto Roosevelt. Bogotá, Colombia
* Dirigir correspondencia a: olpinzone@unal.edu.co
RESUMEN
Introducción: Identificar la asociación que existe entre el puntaje de riesgo nutricional por tamizaje
STRONGkids con el diagnóstico médico de ingreso y la estancia hospitalaria. Métodos: Estudio analítico
retrospectivo, que se realizó a partir del registro de 1231 tamizajes nutricionales realizados a pacientes
pediátricos hospitalizados en un Instituto de mediana complejidad y su asociación mediante la revisión de la
base de datos con información de diagnóstico médico de ingreso y días de estancia hospitalaria. Para el
análisis estadístico se realizó prueba de independencia mediante la herramienta de Chi-cuadrado, seguido de
la medición de la intensidad de asociación mediante el cálculo de coeficiente de contingencia y coeficiente V
de Cramer. Finalmente, la descripción de las asociaciones se realizó a través de la herramienta de análisis de
correspondencias. Resultados: Los datos obtenidos en el análisis muestran una asociación moderada entre
las variables de riesgo nutricional, estancia hospitalaria y diagnóstico médico de ingreso; demostrando que los
mayores puntajes de riesgo nutricional se asocian con mayor tiempo de estancia hospitalaria Conclusiones:
La asociación existente entre un mayor puntaje de riesgo nutricional y una estancia hospitalaria prolongada,
soporta la necesidad de implementar herramientas que permiten la identificación temprana de pacientes que
requieren una intervención nutricional oportuna, disminuyendo las complicaciones de los pacientes y los costos
asociados a la atención en salud
Proceso editorial
Recibido: 10 09 19
Aceptado:10 06 20
Publicado:19 06 20
Palabras clave: Desnutrición; trastornos de la nutrición del niño; hospital; evaluación.
ABSTRACT
DOI 10.17081/innosa.78
©Copyright 2020
Ortiz-Beltrán
1
et al.
Background: To identify the existing correlations between the nutritional risk score based on STRONGkids
screening and the medical diagnosis at admission and Hospital stay. Methods: retrospective analytical study,
performed with 1231 nutritional screening records done to pediatric patients hospitalized in an institution of
medium complexity and their correlations based on the revision of database with information related to the
medical diagnosis at the time of admission and hospital stay measured on days. Results were statistically
analyzed by means of the Chi Square test for Independence. The intensity of the association was then
measured through the calculation of the contingency coefficient and Cramer’s v coefficient. Finally, the
description of the correlations was done through the correspondence analysis tool. Results: The data obtained
through the analysis show a moderate correlation between the nutritional risk variables, hospital stay, and
medical diagnosis at admission; demonstrating that the highest nutritional risk scores are related with longer
hospital stays. Conclusions: The existing correlation between a higher nutritional risk score and a prolonged
hospital stay, supports the need for implementation of tools that help to early identify patients in need of a timely
nutritional intervention thus lowering patient complications and healthcare costs
Keywords: Malnutrition; child nutrition disorders; hospital; assessment.
93
I. INTRODUCCIÓN
Un adecuado estado nutricional en los niños se relaciona con un buen estado de salud, en la
medida que permite un adecuado desarrollo y potencial de crecimiento; contrario a esto, un
estado de desnutrición se puede asociar a un tercio de las muertes en menores de cinco años y
se relaciona con diferentes complicaciones que afectan el patrón normal de crecimiento y
desarrollo (1)(2).
A nivel hospitalario son diversas las causas que se asocian a un aumento de la probabilidad de
conllevar a deterioro nutricional en los niños, por lo que un estado de desnutrición, alteraciones
en el patrón de crecimiento y el desarrollo en esta etapa de vida desarrollado durante la
hospitalización puede tener importantes consecuencias en los desenlaces clínicos, como el
retraso en la cicatrización, además de complicaciones de tipo infeccioso que por lo general
prolongan la estancia hospitalaria (2)(3).
Es por esto que, el identificar de forma oportuna el riesgo nutricional a nivel hospitalario resulta
de suma importancia en la medida que permite identificar aquellos pacientes que por
determinadas condiciones requieren de un proceso de cuidado nutricional, evitando de esta
forma las complicaciones asociadas a la desnutrición como la repercusión en la evolución clínica
de los enfermos, mayor tiempo de estancia hospitalaria e incremento en la mortalidad, además
de los costos que atrae a la institución hospitalaria (3).
Por consiguiente, sociedades científicas como las Sociedad Americana de Nutrición Enteral y
Parenteral (ASPEN) han desarrollado herramientas de tamizaje nutricional que identifican
mediante escalas a aquellos pacientes que requieren de atención nutricional temprana, como
parte de un proceso para identificar al paciente que se encuentra desnutrido o en riesgo de
desnutrición y esta forma derivar a una evaluación nutricional (4).
De acuerdo a esto, para la identificación de pacientes en riesgo nutricional a nivel pediátrico se
han establecido diferentes herramientas como Nutrition Risk Score (NRS), Pediatric Nutritional,
Risk Score (PYMS), Screening Tool for the Assessment of Malnutrition in Paediatrics (STAMP),
Paediatric Yorkhill Malnutrition Score (PNRS), Screening Tool for Risk of Impaired Nutritional
Status and Growth (STRONG kids) y Subjetive Global Nutritional Assessment (SGNA) (5).
La presente investigación, utilizó como instrumento, el Screening Tool for Risk of Impaired
Nutritional Status and Growth (STRONG kids), la cual es una herramienta de detección de riesgo
de desnutrición validada para paciente hospitalizado de 1 mes a 17 años. Algunas publicaciones
han demostrado una sensibilidad del 100%, una especificidad del 89%, un valor predictivo
negativo del 100% y un valor predictivo positivo del 36% (6)(7).
Teniendo en cuenta lo anterior, el objetivo del presente estudio es identificar si existe asociación
entre el puntaje de riesgo nutricional en paciente pediátrico por tamizaje STRONGkids con el
diagnóstico médico de ingreso y la estancia hospitalaria.
94
II. MÉTODOS
Tipo de estudio. La presente investigación se basó en un estudio de tipo analítico retrospectivo
que buscó determinar asociación entre el puntaje de riesgo nutricional, el diagnóstico médico
de ingreso y la estancia hospitalaria
Muestra: Se partió de la base de datos de las tamizaciones nutricionales realizadas entre el 1
de enero y el 31 de marzo de 2019 de 1231 pacientes pediátricos ingresados en una institución
hospitalaria de mediana complejidad. La base de datos anonimizada, permitió identificar la
ubicación del paciente al momento del tamizaje (Hospitalización o UCI), datos clínicos y el
puntaje de riesgo nutricional obtenido con la aplicación de la herramienta STRONGkids al
momento del ingreso.
Procedimiento: La tamización fue realizada por personal capacitado de la institución teniendo
en cuenta los parámetros definidos por la herramienta SRTRONGkids, la cual a partir de 4
preguntas relacionadas con la enfermedad subyacente, evaluación clínica subjetiva, ingesta
de alimentos y cambios de peso, establece el riesgo nutricional y la necesidad de
intervención; donde un puntaje de 0 indica un riesgo nutricional bajo, entre 1 y 3 un riesgo
nutricional medio y un puntaje entre 4 y 5 un riesgo nutricional alto (8).
Posteriormente, se realizó la revisión de las historias clínicas con el fin de extraer en cada caso
el diagnóstico médico de ingreso a hospitalización (código CIE10), el sexo, además de la fecha
de ingreso y egreso de hospitalización para determinar el número de días de la estancia
hospitalaria.
La información y datos obtenidos fueron transferidos a una base de datos informática (Excel).
Al completar cada uno de los registros, se calculó el número de días de estancia hospitalaria
y se realizó el análisis estadístico indicado para determinar las medidas de asociación entre
las variables de riesgo nutricional, diagnóstico de ingreso y días de estancia hospitalaria.
Criterios de inclusión y de exclusión. Para la selección de los pacientes se tuvo en cuenta que
los individuos se encontraran entre las edades de 1 mes y 18 años, que fueran evaluados con
la herramienta de tamizaje nutricional STRONGkids, con registro en la historia clínica además
de haber sido ingresados a los servicios de hospitalización o la unidad de cuidados intensivos.
Análisis estadístico: Se realizó prueba de independencia mediante la herramienta de Chi-
cuadrado, seguido de la medición de la intensidad de asociación mediante el cálculo de
coeficiente de contingencia y coeficiente V de Cramer. Finalmente, la descripción de las
asociaciones se realizó a través de la herramienta de análisis de correspondencias.
En cuanto al análisis de correspondencias, se estableció como objetivo crear un mapa de la
posición relativa de las variables riesgo nutricional, diagnóstico y días de estancia en el
hospital, con cada uno de sus valores posibles, con el fin de evidenciar el grado de asociación
entre ellas.
Consideraciones éticas: La presente investigación se clasificó según la resolución 8430 de
1993 como una investigación sin riesgo dado que se parte de investigación documental
retrospectiva a partir de la utilización del registro de datos y de las historias clínicas. Además,
se contó con los debidos permisos y avales institucionales para su ejecución.
95
III. RESULTADOS
Un primer análisis descriptivo evidenció que la mayor proporción de individuos se encontraba
en un puntaje de riesgo nutricional bajo con un 49.3%, otra gran parte de la población (48.5%)
se clasifico con un riesgo nutricional medio, es decir entre puntajes de 1-3; y una pequeña
parte se clasifico con riesgo nutricional alto con un 2.2%. Al promediar los días de estancia
hospitalaria de los diferentes pacientes clasificados en los puntajes de riesgo nutricional fue
posible identificar que a mayor puntaje de riesgo se aumenta el promedio de días de estancia
hospitalaria, como se observa en la Tabla 1.
Tabla 1. Descripción de resultados
Puntaje Tamizaje
Nutricional
Pacientes
n (%)
Promedio de días estancia
hospitalaria
0
607 (49,3)
3,5
1
379 (30,8)
5,0
2
179 (14,5)
5,4
3
39 (3,2)
11,9
4
16 (1,3)
13,3
5
11 (0,9)
18,6
Fuente: Elaboración propia de los autores
Seguido, la asociación entre nivel de riesgo nutricional y número de días de estancia
hospitalaria, se determinó la independencia de las variables, seguido por la determinación de
la intensidad en la asociación a partir de la prueba de independencia χ ², a partir de la cual se
obtuvo un p valor = 6.464 × 10−14, que condujo a rechazar la hipótesis nula H0: Hay
independencia entre las variables, es decir, con un nivel de significancia de α = 0.05, se
concluye que existe relación entre las variables días de estancia hospitalaria y puntaje de
riesgo nutricional medido con la herramienta STRONGkids.
Posteriormente, las pruebas de asociación denominadas Coeficiente de contingencia C y
Coeficiente V de Cramer, donde las categorías de la variable nivel de riesgo y número de días
hospitalizado respectivamente, demostraron ser variables que están asociadas
moderadamente (0.2 < V1 ≤ 0.6).
Teniendo en cuenta que la hipótesis nula H0: Hay independencia entre las variables” se
rechazó, se realizó el análisis de correspondencias simples para verificar y describir las
relaciones entre estas variables. Para este análisis se tomaron los dos primeros ejes puesto
que las dimensiones de la tabla de contingencia son n = 36 y k = 3. Así mismo en la gráfica se
reconoce al puntaje de riesgo 0, los pacientes sin riesgo nutricional, puntaje de riesgo 1
pacientes de riesgo nutricional con puntajes de entre 1 y 3 y puntaje de riesgo 2, aquellos con
puntaje entre 4 y 5.
En la Figura 1 se puede observar el plano factorial, en el cual en el primer eje al lado derecho
se encuentra el riesgo nivel 2, que es el que está mejor proyectado. En cambio, en el segundo
eje están ubicados los niveles de riesgo 0 y 1, en la parte superior e inferior respectivamente.
Además de lo anterior se puede ver que el número de días 22, 16 y más de 64 están asociados
96
al nivel alto de riesgo nutricional. Por otra parte, el mayor número de días de estancia
hospitalaria se relaciona con el nivel de riesgo medio y para el nivel bajo de riesgo nutricional
se encuentran menor número de días de hospitalización.
Figura 1. Plano factorial de las variables nivel de riesgo nutricional y número de días de
estancia hospitalaria.
Lo anterior grafica obtenida a partir del análisis de correspondencias permite determinar que
pacientes que están en el hospital, con estancias de +64, 27, 22, 16 o12 días están asociados
a un puntaje alto de riego nutricional, y su representación está en el primer eje. Pacientes que
se encuentran en el hospital con estancias de 0, 1, 2, 5, 7 días están asociados a un riesgo
nutricional bajo (nivel de riesgo 0).
De manera que se evidencia que aquellos pacientes con mayor tiempo de estancia hospitalaria
se asociaron con mayor puntaje de riesgo nutricional, contrario a esto, pacientes con riesgo
nutricional bajo se asociaron con menor tiempo de estancia hospitalaria.
Para evidenciar de otro modo lo anteriormente mencionado se realizó un árbol de clasificacn
del número de días de hospitalización según el riesgo nutricional, tomando en cuenta que se
tienen 3 grupos de clasificación debido a que se puede ver una separación fuerte entre las
ramas. En la Figura 2 se puede apreciar las subdivisiones existentes de los días de
permanencia en el hospital de un niño y el nivel de riesgo de desnutrición con el que llega, en
donde el nivel de riesgo nutricional bajo está asociado al color rojo, con un total de 18
elementos de la categoría número de días; el nivel de riesgo nutricional medio con el color
verde y un total de 15 elementos; y un alto nivel de desnutrición con el color azul, con un total
de 3 categorías de número de días.
97
Figura 2. Subdivisiones existentes de los días de permanencia en el hospital de un niño y el
puntaje de riesgo de desnutrición
En relación con la asociación entre nivel de riesgo nutricional y diagnóstico de ingreso a
hospitalización, mediante prueba de independencia χ ², se decide rechazar la hipótesis nula
H0: Hay independencia entre las variables, por lo tanto, con un nivel de significancia de α =
0.05, se infiere que hay una relación entre las variables riesgo nutricional y diagnóstico.
Teniendo en cuenta esto, se realizó un análisis de correspondencias simples para verificar y
describir las relaciones entre dos variables categóricas dispuestas. Para este análisis se
tomaron los dos primeros ejes puesto que las dimensiones de la tabla de contingencia son n =
195 y k = 3.
A partir del análisis del plano factorial y por medio de una clasificación jerárquica fue posible
realizar una organización de subcategorías en orden de determinar mayor detalle entre las
agrupaciones de los diagnósticos planteados. Para escoger el total de grupos se realizó un
árbol de clasificación, se cortó teniendo en cuenta las ramas con mayor distancia entre ellas y
en donde se ve un cambio de varianza notorio.
Al dividir en 4 partes el árbol, se evidenció una separación fuerte entre las ramas, por lo que
se clasificaron los diagnósticos en 4 grupos donde hay 72, 53, 63 y 7 diagnósticos
correspondientemente en cada uno de ellos.
Con relación a la caracterización de los grupos, en el cuarto grupo se encontraron dos
diagnósticos pertenecientes a la clasificación Enfermedades del riñón y del uréter N111, N179
Enfermedades del sistema digestivo K258, K912, Malformaciones congénitas del sistema
98
nervioso, Q02X, Malformaciones congénitas del esófago, Q393 e Hidrocéfalo no especificado
G919.
En el tercer grupo, se encuentran Contusiones S300, S500, Alteraciones de sensibilidad
cutánea, otras malformaciones congénitas, deformidades y anomalías cromosómicas Q00-
Q99, aquí nuevamente se presentan un par de diagnósticos relacionados con Enfermedades
del riñón y del uréter N189, N309, enfermedades del sistema osteomuscular y del tejido
conjuntivo y enfermedades intestinales.
En el grupo dos, por otro lado, se encuentran Enfermedad respiratoria crónica originada en el
período perinatal P271, Enteritis y Colitis no infecciosas, junto con otros trastornos
funcionales del intestino y sistema digestivo, haciendo presencia enfermedades de reflujo
gástrico y apendicitis; aquí también aparecen diagnósticos relacionados con el sistema
respiratorio como por ejemplo Influenza, Neumonía y enfermedades crónicas de las vías
respiratorias, por otro lado, se observa la aparición de enfermedades del sistema nervioso y
de los órganos de los sentidos como lo son trastornos mentales y del comportamiento,
F419 y por último, enfermedades infecciosas y parasitarias y sus efectos tardíos.
Finalmente, en el primer grupo se encontraron clasificaciones varias de diagnóstico, siendo
estas las siguientes, Enfermedades infecciosas y parasitarias A00-B99, Tumores C579,
Afecciones hemorrágicas e inmunodeficiencias D692, D818, Diabetes insípida E232,
nuevamente hace presencian las categorías de Enfermedades del sistema nervioso y de los
órganos de los sentidos con los códigos iniciados por G, Enfermedades del sistema digestivo,
con K, Enfermedades del sistema osteomuscular y del tejido conjuntivo, M00-M99,
Malformaciones congénitas, deformidades y anomalías cromosómicas, Q00-Q99 y
Contusiones, fracturas o traumatismos S00-S99.
A continuación, en la Tabla 2 se organizan los grupos anteriormente mencionados además del
porcentaje que hay de cada puntaje de riesgo en el respectivo grupo de diagnósticos, a nivel
interno y de forma global.
De acuerdo a la anterior tabla se evidencia que en el grupo 2 aumenta la proporción de
diagnósticos que tienen una asociación con el nivel de riesgo 0 (52.06 % vs 49.31 %) y la
proporción de diagnósticos que tienen un nivel de riesgo 1 es similar a la global (46.00 % vs
48.50 %). De este modo, diagnósticos como Otros estados epilépticos G418, Otras
convulsiones y las no especificadas R568, Asma, no especificado J459, Otras artritis juveniles
M088 y Deformidad congénita de la cadera, no especificada Q659 están asociados con los
niveles de riesgo bajo y medio.
En el grupo 3 se puede notar que la mayoría de diagnósticos tienen una asociación con el nivel
de riesgo 1 (90.64 %). De esta forma, diagnósticos como Exantema súbito [sexta enfermedad]
B082, Leishmaniasis, no especificada B559, Enfermedad de Chagas (crónica) que afecta
otros órganos B575, Virus sincicial respiratorio como causa de enfermedades clasificadas en
otros capítulos B974 y Lesión de sitios contiguos de la amígdala C098 están asociados con un
nivel de riesgo medio.
En el grupo 4 la proporción de diagnósticos que tienen una asociación con el nivel de riesgo 2
es mayor al promedio (47.06 % vs 2.19 %). De modo tal que diagnósticos como Insuficiencia
renal aguda, no especificada N179, Microcefalia Q02X, Pielonefritis crónica obstructiva N111,
99
Hidrocéfalo no especificado G919 y Otras colitis y gastroenteritis no infecciosas especificadas
K528 están relacionadas con un nivel de riesgo alto.
Tabla 2. Caracterización de grupos por nivel de riesgo.
Grupo 2
Nivel de riesgo
% Global
Frecuencia
interna
Frecuencia
global
Valor P.
Valor test
0
49.31
420.00
607.00
0.00
2.99
2
2.19
12.00
27.00
0.04
-2.02
1
48.50
368.00
597.00
0.02
-2.33
Grupo 3
Nivel de riesgo
% Global
Frecuencia
interna
Frecuencia
global
Valor P.
Valor test
1
0
48.50
49.31
213.00
15.00
597.00
607.00
0.00
0.00
15.11
-15.70
Grupo 4
Nivel de riesgo
% Global
Frecuencia
interna
Frecuencia
global
Valor P.
Valor test
2
0
2.19
49.31
8.00
2.00
27.00
607.00
0.00
0.00
6.16
-3.01
Fuente: Elaboración propia de los autores
IV. DISCUSIÓN
De acuerdo con los resultados anteriores alrededor de un 51% de la población estudiada se
encontraba con un riesgo medio y alto de desnutrición según la prueba de tamizaje
STRONGkids; al intentar comparar esta cifra con valores reportados por algún estudio
realizado en Colombia, no se encuentra alguno que analice el porcentaje de pacientes en
riesgo nutricional, solo se identifica uno que menciona un porcentaje global de bajo peso de
27% en niños hospitalizados menores de 5 años.(9)
Al comparar estas cifras con estudios realizados con población pediátrica en Latinoamérica,
se identificaron tres estudios realizados en Brasil, con prevalencias de población de riesgo
nutricional medio y alto en 63.1%, 69% y 72%, clasificados también con la herramienta
STRONGkids (10)(11)(12). Lo anterior evidencia que tanto en el presente estudio como en
los
100
mencionados más de la mitad de pacientes pediátricos evaluados se encontraba con algún
parámetro que favorecía el deterioro del estado nutricional y por ende requerían de una
atención nutricional temprana.
Por otro lado, de acuerdo con los resultados obtenidos, fue posible identificar la relación que
existe entre las variables de riesgo nutricional y estancia hospitalaria, estando estas asociadas
con una intensidad moderada. Algunos estudios identificados determinaron la asociación
existente entre la desnutrición con el aumento de estancia hospitalaria en niños (6)(13)(14),
sin embargo no se menciona la asociación existente entre el puntaje de riesgo nutricional con
el incremento de la estancia hospitalaria.
Lo anterior deja en claro que al igual que los pacientes con desnutrición, aquellos con algún
nivel de riesgo requieren de atención nutricional oportuna para evitar dificultades asociadas
como el aumento de estancia hospitalaria y por ende mayor deterioro nutricional (15).
En adición a lo anterior, reportes de investigación confirman el hecho de que un deterioro
nutricional previo al ingreso de hospitalización incrementa la estancia hospitalaria y prolonga
el proceso de recuperación (9)(16), esto puede estar vinculado a la asociación encontrada
entre puntaje de riesgo y mayor estancia hospitalaria teniendo en cuenta que los parámetros
de evaluación tienen en cuenta la enfermedad subyacente, la evaluación clínica subjetiva, la
ingesta de alimentos y cambios de peso; y los cuales pueden verse alterados durante el
proceso de hospitalización o encontrarse alterados al momento del ingreso (8)(17).
En relación con el análisis de las variables de diagnóstico de ingreso a hospitalización y puntaje
de riesgo nutricional, fue posible identificar la dependencia y asociación estadística que existe.
De forma particular, se identificaron los grupos a los cuales pertenecían aquellos diagnósticos
que tenían mayor asociación con el puntaje de riesgo nutricional alto, encontrando que dos de
estos pertenecían a la clasificación enfermedades del riñón y del uréter (Insuficiencia renal
aguda y Pielonefritis crónica obstructiva), un diagnostico al grupo de enfermedades del sistema
digestivo (Otras colitis y gastroenteritis no infecciosas), otro de ellos, al de malformaciones
congénitas del sistema nervioso (Microcefalia), además malformaciones congénitas del
esófago e hidrocéfalo no especificado.
En cuanto a aquellos diagnósticos asociados con un nivel de desnutrición medio, se identificó
que algunos se encuentran en el grupo de las contusiones, otra parte de ellos en el de
alteraciones de sensibilidad cutánea, de nuevo se presenta el grupo de otras malformaciones
congénitas, se identifican nuevamente algunos diagnósticos relacionados con enfermedades
del riñón además de una parte perteneciente al grupo de enfermedades intestinales.
De acuerdo con esto, se establece que son diversos los diagnósticos que pueden llegar a
aumentar el riesgo de deteriorar el estado nutricional, donde se pueden diferenciar aquellos
que interfieren con un adecuado desarrollo neurológico, asociados a sintomatologías de tipo
digestivo o aquellos que intervienen con una adecuada función del sistema renal
principalmente.
Por consiguiente, esta relación puede estar vinculada con las implicaciones propias a algunas
enfermedades que favorecen una ingesta calórica inferior a los requerimientos del paciente o
la presencia de sintomatología digestiva que puede llegar a dificultar la ingesta de alimentos
(18).
101
En adición a lo anterior, la presencia de enfermedad y tratamiento lleva de la mano al riesgo
nutricional dado que estas producen una alteración del equilibrio nutricional; además, el grado
de afectación dependerá de la intensidad y duración de estas. Lo anterior se suma a las
dificultades encontradas en el entorno clínico, donde priman las pérdidas sobre los ingresos
nutricionales además de los severos trastornos metabólicos en algunos casos (19)(20).
Así mismo, existen otros factores que pueden asociarse con el riesgo nutricional a nivel
hospitalario, estas se evidencian en un estudio cuyo objetivo fue determinar factores asociados
al puntaje de riesgo nutricional medido con la herramienta STRONGkids, encontrando que
algunas características como las condiciones socioeconómicas y la edad materna se asocian
con un puntaje de riesgo nutricional alto (11).
Lo anterior deja en claro que, si bien existen algunos factores a nivel hospitalario que pueden
favorecer el riesgo de desnutrición, los de tipo socioeconómico en un país en vía de desarrollo
como Colombia, donde existen problemas de pobreza en gran parte de la población, pueden
llegar a impactar el riesgo de desnutrición de forma negativa (21).
Es por esto por lo que el incorporar herramientas de tamizaje nutricional en los diferentes
protocolos de las instituciones prestadoras de salud en nuestro país resulta de suma
importancia para evitar complicaciones como el aumento de la estancia hospitalaria, la cual se
ha demostrado se asocia de manera significativa con el riesgo de desnutrición.
V. CONCLUSIONES
La asociación existente entre puntaje de riesgo nutricional alto y mayor tiempo de estancia
hospitalaria soporta la necesidad de implementar en las instituciones hospitalarias
herramientas que permitan la identificación temprana del riesgo para la respectiva derivación
a una intervención nutricional temprana y oportuna con el fin de evitar las complicaciones
asociadas a la desnutrición además de los costos asociados.
Además, la tamización nutricional no solo resulta de importancia para la medición del riesgo
nutricional sino para favorecer la toma de decisiones al momento de escoger el tratamiento
nutricional oportuno para cada paciente de acuerdo a su condición clínica, por lo que se ha de
incorporar en los protocolos de evaluación nutricional de pacientes pediátricos hospitalizados
Del mismo modo, existen algunas enfermedades que se asocian con un puntaje de riesgo
nutricional alto, como algunas encontradas dentro del grupo de enfermedades del riñón y las
clasificadas dentro del grupo de enfermedades intestinales principalmente; esto puede ser
tenido en cuenta como factor para dar prioridad al momento de realizar el abordaje nutricional
de los diferentes pacientes.
Finalmente resulta de gran importancia la identificación del riesgo nutricional en países como
el nuestro donde las condiciones de tipo socioeconómico, sumadas a los factores que
favorecen el deterioro nutricional a nivel hospitalario aumentan la probabilidad de desnutrición
de los pacientes pediátricos y por ende las consecuencias que ejerce sobre un adecuado
crecimiento y desarrollo.
102
Agradecimientos. Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Ciencias, Departamento
de Estadística, Carrera de Estadística. Consultoría: Jimmy Antonio Corzo Salamanca, Sara
Lucía Acosta Pinzón, Ana María Cardozo Malagón, Wendy Alejandra Corredor Morales,
Mónica Alexandra Gómez Martínez. Y al Instituto Roosevelt, a las áreas de educación e
investigación y nutrición.
Contribución de los autores: "Conceptualización Olga Lucía Pinzón-Espitia; metodología,
Olga Lucía Pinzón-Espitia y Laura Brigitte Aya-Ramos; software, validación, y análisis formal,
Consultoría Carrera de Estadística de la Universidad Nacional de Colombia, sede Bogotá;
investigación, Olga Lucía Pinzón-Espitia y Omar Danilo Ortiz-Beltrán; recursos, Olga Lucía
Pinzón-Espitia y Omar Danilo Ortiz-Beltrán; curación de datos, Omar Danilo Ortiz-Beltrán;
Todos los autores contribuyeron a la escritura: preparación del borrador original, escritura:
revisión y edición, visualización; supervisión, Olga Lucía Pinzón-Espitia; administración del
proyecto, Olga Lucía Pinzón-Espitia. Todos los autores han leído y aceptado la versión
publicada del manuscrito.”
Conflictos de intereses: Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.
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