30
UNASUR, etc.) se viene planteando, la urgen-
cia creciente de crear condiciones que permitan
avanzar en la convergencia de las normas y las
políticas sociales que faciliten efectivamente, el
desarrollo humano de la región, que incorpore
por ejemplo, los Derechos Humanos y labora-
les, el tema de las migraciones intrarregionales
y la ciudadanía compartida, la descentralización
y los procesos de democratización y reforma del
Estado, los derechos económicos y sociales, la
previsión, la salud y la educación, entre otros
(Franco & Di Filippo, 1999).
&DUDFWHUtVWLFDVPiVLPSRUWDQWHVHQHOSUR
FHVRGHFRQVWUXFFLyQGHO$/%$7&3
(VLQWHUHVDQWH LGHQWL¿FDUTXHGHQWUR GHORV
objetivos planteados por el ALBA-TCP, se en-
cuentre en un primer plano la preservación de
la autonomía e identidad latinoamericana. Aun-
que es una difícil apuesta desde el punto de vis-
ta sociológico, pues resulta altamente complejo
hablar de una identidad latinoamericana como
un todo, especialmente con los actuales niveles
de fragmentación social y política de la región
(Maira & Hirst, 2007). Más bien, el énfasis es
puesto en las características históricas de auto-
rrealización o en las referencias idiomáticas, que
parecen ser un factor fuerte de vinculación re-
gional. En todo caso, la atención a los elementos
identitarios, evidencian la importancia que este
sistema de integración otorga a la cuestión cul-
tural y que involucra, por lo menos en el discur-
so, la consideración de la inclusión sociocultural
a los ámbitos de integración regional.
Otro aspecto importante que se destaca den-
tro de los objetivos del ALBA-TCP es la promo-
ción de la lucha contra la pobreza y la exclusión
social. Según sus defensores, no puede haber un
área de libre comercio, mientras no se corrijan
las asimetrías históricas entre países, lo que im-
plicaría un proceso bastante largo, si se conside-
ran por ejemplo, las diferencias entre la econo-
mía venezolana con respecto a la nicaragüense.
Ahora bien, en relación al acceso a mercados,
los impulsores del ALBA-TCP plantean, que no
se pueden eliminar los aranceles con respecto a
las grandes potencias, mientras estas conserven
los subsidios y las ayudas internas a sus agricul-
tores. Pero se propone, a nivel de los que com-
ponen la iniciativa de integración, mantener un
marco de promoción y protección de las cuotas,
las licencias y otras medidas no arancelarias,
como instrumentos de política para favorecer la
agricultura y la industria de cada país.
Como un aspecto relevante en torno a las in-
versiones, se plantea el condicionamiento a la ad-
quisición de materias primas, bienes y servicios
nacionales, así como la necesidad de mejorar la
transferencia tecnológica y asistencia técnica,
la formación de recursos humanos, pero, sobre
la base de que los inversionistas extranjeros no
podrán demandar contra leyes y regulaciones de
interés público. Otro aspecto que señala más la
orientación política de los objetivos del ALBA-
TCP, es la protección a los servicios públicos de
necesidad social, de esta forma, se plantea que
es necesario mantener todos los servicios públi-
cos indispensables para la población que así lo
determine el marco de regulación de cada país.
Está claro que el libre juego del capital en
Justicia, No. 26 - pp. 26-43 - Diciembre 2014 - Universidad Simón Bolívar - Barranquilla, Colombia - ISSN: 0124-7441
http://publicaciones.unisimonbolivar.edu.co/rdigital/justicia/index.php/justicia
LUIS FERNANDO TREJOS ROSERO, MELISSA JOHANNA PELÁEZ BLANDÓN